Inicio Ahi estuvimos Lollapalooza Berlín 2016: un festival de amplio espectro (Sept 10 y 11)

Lollapalooza Berlín 2016: un festival de amplio espectro (Sept 10 y 11)

Lollapalooza Berlin 2016

El pasado 10 y 11 de septiembre estuvimos inmersos en el majestuoso y envolvente parque Treptower en la capital alemana donde se celebró por segunda vez el Lollapalooza Berlín, hasta ahora la única edición europea del legendario festival americano.

Verónica Estrada

“Hace un par de años se apostaba muy poco en traer el Lollapalooza a alguna ciudad europea por la competitividad que existe en esta área”, nos cuenta Perry Farrell, fundador del festival y líder de Jane’s Addiction, en la breve entrevista que pudimos hacerle. Por eso es motivo de alegría para los organizadores destacar que este año la audiencia del festival creció en un 35% con respecto a 2015 y durante cada jornada acudieron 70.000 personas. Este año, al igual que el anterior, se colgó el cartel de “agotado” días antes de que empezara el festival.

Los asistentes son muy variados, reflejo de lo diversa que es la programación y los espacios recreacionales del evento: familias que pasaron el día completo con sus hijos en la zona Kidzapalooza o en la feria circense de estilo retro denominada Lolla Fun Fair, jóvenes que no pararon de bailar al ritmo de DJs de varias nacionalidades en el escenario Perry’s, aquellos que querían descubrir nuevos sonidos o ver viejas glorias se apoderaron del Alternative Stage y los que disfrutan más del mainstream hicieron ping-pong entre el Main Stage 1 y el Main Stage 2, los cuales estaban enfrentados el uno del otro.

Más allá de la música, y como es costumbre en todos los Lollapalooza, pudimos encontrarnos con acciones de arte callejero y también reflexionar en la zona dedicada al cuidado del medio ambiente. En Der Grüne Kiez (El Barrio Verde) aprendimos a través de talleres y juegos sobre el reciclaje, la importancia del agua, la alimentación equilibrada y la afectación del cambio climático. Con una bonita exposición de plantas e insectos que habitan en Treptower, se nos dejaba muy claro que teníamos que cuidar el parque que durante ese fin de semana nos arropaba bajo la copa de sus árboles.

Día 1: estos 30 grados no nos detendrán

Los conciertos solían empezar a las 11:30 de la mañana, pero a partir de las 10:00 AM ya estaban las puertas abiertas para aquellos que quisieran aprovechar las actividades del llamado The Breakfast Club. Los madrugadores podían disfrutar de sesiones de yoga, maquillaje y estilismo festivalero, foodtrucks con grandes desayunos para aguantar casi toda la jornada y ayuda personalizada para organizar tu horario si aún no tenías decidido qué espectáculos ver

La jornada del sábado empezó con los ánimos por todo lo alto de la mano del ska-punk-reggae de Dubioza Kolektiv (Bosnia), quienes pusieron a brincar a la audiencia desde el minuto uno a pesar de los 30 grados de temperatura que nos azotaron durante el fin de semana. Más adelante, y en otra tarima, la bailarina y violinista Lindsey Stirling (Estados Unidos) nos conquistó con su frescura, movimientos y divertidas notas rítmicas.

Más avanzada la tarde, el escenario Perry’s le quedó pequeño al DJ y productor noruego de 19 años, Alan Walker; mientras que en el Alternative Stage, Kaiser Chiefs (Reino Unido) nos adelantó un par de temas de su nueva producción que verá la luz a principios de octubre. Los británicos cedieron el paso al dúo electrónico de Seattle, Odesza, que hizo bailar a una gran multitud de jóvenes que conocían sus temas de inicio a fin. El rapero californiano G-Eazy, fue el siguiente acto que hizo que el ambiente siguiera subiendo como la espuma, sobre todo cuando dedicó un tema al controversial candidato a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, dejando más que claro que no lo apoya.

Para cerrar la tanda del primer día, en uno de los escenarios principales teníamos al cabeza de cartel Kings of Leon, pero nos decantamos por ver a los míticos New Order, quienes empezaron su show con imágenes de la espectacular película “B-Movie: Lust & Sound in West-Berlin 1979-1989” (2015). Los de Manchester hicieron gala de todos sus clásicos ochenteros y un par de versiones de Joy Division: “Decades” y “Love Will Tear us Apart” acompañadas visualmente con fotografías y videos de Ian Curtis.

 

Día 2: más de 12 horas de música y actividades

Nada de dominguear, empezamos el día desde temprano porque queríamos ver a la única representación española dentro del festival. Luis Alberto Segura y su banda, conocidos brevemente como L.A., abrieron el Alternative Stage con su pop rock americano aderezado con pinceladas de mediterráneo.

El día comenzaba más tranquilo que el anterior pero iría subiendo poco a poco. En uno de los escenarios principales se abría paso Aurora, la cantante de electro-pop noruega de tan sólo 20 años de edad. Una pena que no interpretara la delicada versión de “Life on Mars” de David Bowie.

Los australianos The Temper Trap, lo dieron todo y más al tratarse de su primer concierto en suelo berlinés. Uno de los escenarios más llenos durante todo el domingo fue el Perry’s, el público no paró de bailar al ritmo de las mezclas de Lost Frequencies, Martin Solveig y Alle Farben.

Durante la tarde fuímos invitados por la cerveza alemana Warsteiner a un paseo en barco por el río Spree acompañados del rhythm and blues electrónico del dúo Schwarz Dont Crack . #Musikdurstig Floss fue un evento creado por la cervecería especialmente para el festival y que durante todo el fin de semana tuvo programado conciertos de bandas nóveles.

De vuelta en la locación del festival, era el turno para los locales Milky Chance, quienes habían generado mucha expectativa y llenaron uno de los escenarios principales. Le siguió James Blake con un show impecable donde pudo presentarnos temas de su recién lanzada producción The Colour in Anything, por supuesto sin dejar de lado canciones de sus discos anteriores.

Luego de un set calmado con el británico, en la tarima de enfrente se prendía la fiesta del año con Major Lazer. Es bastante difícil expresar con palabras el jolgorio desenfrenado que causa Diplo y compañía con sus temas. La multitud pierde el control, canta todos los temas, mueve partes del cuerpo que no sabía que existían y no acepta que el espectáculo llegue a su fin.

¡Por fin! Llega el momento más esperado del festival por muchos, la razón por la cual las entradas para el domingo se terminaron con meses de antelación, era el turno de Radiohead, cuya responsabilidad era cerrar el festival. La banda, liderada por Thom Yorke más hablador que de costumbre, brindó un show de casi dos horas y media donde se pasearon por canciones de casi toda su discografía de estudio (faltó tocar algún tema de Amnesiac). Como ya lo vienen haciendo en esta gira, la mayor parte del repertorio pertenece a su más reciente producción “A Moon Shaped Pool”. Sin embargo, no dejaron de lado clásicos que fueron coreados por todo el público como: “No surprises”, “Paranoid Android” y “Karma Police”. “Creep” ha aparecido en el último encore a pesar de no estar en la lista impresa de canciones. Un sublime despliegue de luces, pantallas y visuales completan un espectáculo que puede ser considerado como uno de los mejores del planeta hoy día.

El año que viene más y mejor, según nos han confirmado en la rueda de prensa realizada el mismo domingo en una de las carpas de circo del espacio Lolla Fun Fest. Así que tendremos Lolla Berlín 2017, pero lo más seguro es que sea en otra locación, ya veremos con qué nos sorprenden el año entrante.