Inicio Ahi estuvimos Una velada de rock sinfónico con la Orquesta Sinfónica de Venezuela

Una velada de rock sinfónico con la Orquesta Sinfónica de Venezuela

Orquesta Sinfónica de Venezuela

Rock & Prog Sinfónico

Aula Magna U.C.V., Caracas

(Noviembre 3, 2019)

 

La escasa oferta musical del panorama local caraqueño, toma un respiro con eventos como este celebrado en el Aula Magna bajo la producción de Orlando Zurita. En el mismo, una nutrida audiencia necesitada de expresiones artísticas como éstas, disfrutó de la música de un género que tiene un sustancioso grupo de melómanos que ha sido fiel seguidor por décadas y del cual, propuestas locales de tiempos remotos, como Estructura, Témpano, Antares, Pig Farm On The Moon y Sonda a Barnard gozaron de cierta relevancia, en algunos casos internacional, lo que ha servido, junto a otros elementos, para mantener la antorcha viva.

Pautado para las once de la mañana, el acto dio inicio veinte minutos más tarde con una extensa exposición, como parte del acto protocolar, de una representante de la Universidad Central de Venezuela. Zurita haría una presentación más breve como preámbulo.

El excelso guitarrista Darío Sosa, el baterista Leonardo Córdova, el teclista Pedro Bastidas y el bajista Premmlin Villamizar, colectivamente conocidos como Freedom, tomaron la tarima para dar inicio al concierto con “Aqualung” de Jethro Tull. El reconocido cellista y miembro fundador de la recordada y extinta Tuyero Submarín, Pedro Vásquez, dio un colorido toque con su atuendo, un sombrero de copa negro y un paltó levita del mismo color.

Si bien el audio no favoreció inicialmente a la banda, la característica emotividad de Pedro salvó la presentación. La hermosa “Firth of Fifth” de Genesis, se vio interrumpida por un fallo del teclista Pedro Bastidas quien, sin dudar, reinició el tema. Manuel Mirabal estaría a cargo de la interpretación vocal. La presentación reflejó, de algún modo, la necesidad de más tiempo de ensayo.

El repertorio, conformado por temas emblemáticos del género, continuó con “Lucky Man” de Emerson, Lake & Palmer en la voz de Darío Sosa acompañado de su guitarra eléctrica. Si bien el sonido no fue óptimo, la audiencia se sintió complacida con la versión presentada.

Pedro retornaría con la más comercial “Comfortably Numb” de Pink Floyd cargada de emotividad en el mejor estilo de Vásquez. La pieza pareció conectar mejor que las anteriores aún con ciertos baches de sonido. Freedom sirvió de soporte a los talentos vocales de Pedro, Manuel, Darío y Huaico Lovera.

El punto medio fue la exigente “Roundabout”, del álbum Fragile de Yes que en palabras de un afamado crítico es “la prueba más contundente de que fue Bach y no Chuck Berry, el creador del rock ´n´ roll”. Sin dudas, una pieza compleja y exigente que tuvo sus altibajos en esta oportunidad.

El grupo ahora cedía espacio a la Orquesta Sinfónica Venezuela, dirigida por el connotado director Alfredo Rugeles, para que el legendario arpista Alexis Rossell interpretara dos emblemáticos temas de su autoría, “El Cordonazo” y “Churún Merú”. Alexis junto a Vytas Brenner (†) representan dos de los pioneros del género progrock en Latinoamerica y de lo que hoy conocemos como “world”.

Orquesta Sinfónica de VenezuelaAlexis haría también una gran demostración de sus talentos tocando el quitiplás, unos trozos de troncos de bambú que se percuten contra el suelo u otra superficie. Luego, la orquesta interpretaría dos temas clásicos del repertorio de Vytas, “Frailejón” y “Ganado” los cuales resonaron contra las nubes de Alexander Calder que ahora forman parte de una “necesitada” Aula Magna. Ambas piezas interpretadas con la majestuosidad de la OSV.

Orquesta Sinfónica de Venezuela Orquesta Sinfónica de VenezuelaDos hermosas piezas clásicas del rock sinfónico, el “Concerto Grosso” de los italianos New Trolls con arreglos de Abraham Maduro y “Fool’s Overture” de Supertramp con arreglos de David Pedroza, continuaron la tarde, ahora con el grupo más integrado a la orquesta y un sonido más definido.

Nuestro pequeño y genial Pedro Vásquez, actuando como Maestro de Ceremonias, nos diría que “Concerto Grosso” tendría en esta presentación su estreno en Venezuela. El concierto continuaría con la lúgubre “Epitafio” de King Crimson, con arreglos de David y un Pedro Vásquez que le entregó toda su alma al tema, y posteriormente la trillada “Another Brick In The Wall”, el pegadizo tema de Pink Floyd que forma parte de su afamada obra conceptual The Wall.

Una rotunda “standing ovation” fue la entrada a los dos temas finales, las eternas “Stairway To Heaven” de Led Zeppelin, interpretada por Huaico Lovera y una hermosa versión instrumental de “Bohemian Rhapsody” de Queen. Y ya cuando parecía que las cartas estaban echadas, el magnífico Alfredo Rugeles volvería con la orquesta más antigua del país para un glorioso encore con las delicadas melodías de “San Agustín” y “Morrocoy” de Vytas Brenner.

La Orquesta estuvo a la altura y no dudo en afirmar que Freedom haya hecho sus mejores esfuerzos, muy buenos músicos sin dudas. Sin embargo, dejó ver la necesidad de un mayor tiempo de ensayo que garantizará así una impecable presentación.

En conjunto Zurita, OSV y Freedom, nos deleitaron con esta música atemporal que convocó tres cuartos de sala y una audiencia complacida. Zurita está aún por darnos lo mejor de sí. En un país donde se desploma la pluralidad cultural, no ha de ser fácil producir eventos, hacerlo ya es una hazaña.

Leonardo Bigott