Cuando Jesús Antúnez -ex batería de Dover durante muchos años- y el guitarrista Eduardo La Mata coincidieron en un proyecto publicitario, sin saberlo se gestaba una de los más esperanzadores proyectos del rock español. Con el bajista Mario Díez Llorente incorporado, el power trío grabó su álbum debut, Diferente, que presentaron en Sala El Sol en octubre de 2018 y ahora llevan a otras ciudades españolas. Este jueves 14 de febrero se presentan en la Joy Eslava, en lo que seguramente será su primer gran reto ante el público de Madrid.
Juan Carlos Ballesta
Cuando en 1966 nació la agrupación inglesa Cream, formada por Jack Bruce, Eric Clapton y Ginger Baker, fue bautizada como el primer super trio del rock. Desde entonces, el formato básico del rock -bajo, guitarra, batería y voz- ha gozado de buena salud y sigue arrojando fantásticas bandas. España cuenta desde el pasado año con un power trío de alto calibre cuyo horizonte se antoja amplio.
Diavlo es una amalgama de hard-boogie-blues-grunge-stoner rock, con algunas cadencias de reggae. Su potencia es evidente. La contundencia de su sonido hace recordar a grupos como Queen Of Stone Age, Black Rebel Motorcycle Club, The Black Keys, Eagles Of Death Metal, ZZ Top, Soundgarden y otras bandas de sonido denso y visceral.
Diavlo apenas empieza, pero sus tres integrantes tienen claro su norte. Además, están apoyados por una agencia que cree e invierte en ellos.
Al encuentro con el Diavlo
En una tarde algo fría, nos encontramos con Eduardo y Jesús en un bar de Malasaña, mientras Mario convalecía de una de las típicas gripes invernales. El encuentro derivó en una conversa en la que cupo de todo, desde los inicios del rocanrol, los problemas de Venezuela, la industria musical, la escena española, Cataluña, internet, los gustos personales y más.
Recordar cómo el blues fue redimensionado por los músicos blancos británicos en los primeros años 60, y la irrupción previa del rocanrol a mediados de los 50 siendo el primer gran fenómeno de masas en el planeta ayudado por el aún joven medio televisivo, con Elvis Presley a la cabeza, nos introdujo en un terreno que dio para mucho y que sirvió para conocer cuáles son los parientes lejanos y más cercanos de Diavlo.
“Rocanrol era el término que se utilizaba para decir follar”, suelta Jesús y eso nos dio pié para realizar una primera pregunta:
¿Cómo y cuando surge la idea del grupo y del particular nombre?
E: Jesús y yo nos conocíamos de un proyecto anterior. El me decía ‘seguro que podemos hacer un disco de rock en una semana’. Era una idea que nos picaba un poco.
J: Empecé a hacer música para publicidad y me pidieron un tema rock. En seguida pensé en Edu porque ya nos conocíamos de un proyecto anterior, que no fue a ningún sitio. Se vino una noche, hicimos un tema, y tampoco salió. Es decir, nos cogieron el tema para la publicidad pero la campaña no salió. Y fue cuando dijimos ‘vamos a hacer un proyecto juntos, tío’. Eso fue en 2017. Poco a poco empezamos a darle forma, a hacer nuevos temas. Se los mandamos a dos amigos, Jon (Ayarza) y Estanis (Figueroa) de nuestra agencia AAA Entertainment, y les encantó.
E: En cuanto al nombre, estábamos barajando varios. De la canción “Diablo” hicimos el primer videoclip. La canción trata un poco sobre la carta del tarot del diablo. Entonces Jon nos dijo que le gustaba que el nombre del grupo fuera Diablo, pero lo buscamos y ese nombre estaba ya cogido. Entonces pregunté ‘¿y con V?”, y dijeron que sí. Y se quedo así. A mí me gusta mucho el rock argentino y muchos de mis grupos favoritos tienen nombres sencillos, fáciles de recordar.
¿En qué se han inspirado para escribir las letras?
J: Nos gusta que los títulos de las canciones sean concretos y directos. Luego que cada quien las interprete como quiera. Escribimos sobre temas universales pero de manera algo abstracta para que tengan varias interpretaciones.
Al ver el primer show de Diavlo, surgieron rápidamente algunas referencias, no solo por el sonido sino incluso por los instrumentos. La batería, por ejemplo, hace recordar a John Bohman (Led Zeppelin), ciertos pasajes a ZZ Top o Queens of Stone Age. ¿De dónde parte el sonido de la banda, en el cual se percibe hard rock, mucho boogie blues e incluso cadencias reggae?
J: (risas) Bohman para mi es el mejor batería de rock de la historia. Yo no toco como él, pero su batería me encanta. Mi bombo es de 28” de diámetro y 20” de profundidad, casi nadie usa algo así. Casi siempre toco con una Sonor y tengo una caja DW de 14” x 10” que es casi un timbal. La que uso casi siempre es una de Sonor de bronce de hace 20 años.
E: No había pensado en eso del reggae, pero puede ser. Mi hermano escucha mucho reggae y a lo mejor se han colado Toots & The Maytals o algún otro grupo antiguo. Tenemos en realidad gustos muy parecidos los tres, aunque hay cosas en las que no coincidimos
¿En qué no coinciden y en qué sí?
J: A mí me encanta Tame Impala, y a ellos no tanto. A Mario le encanta Deep Purple, sobre todo la Mark III (tercera formación) y a mí no me gusta. En cambio me gusta Motley Crue y a Mario que es bastante hardrockero no le gusta. A mí me chifla Tool y a ellos les apesta.
E: En realidad de Tool me gusta sobre todo Untertow (1993), mientras Lateralus (2001) me gusta más ahora que cuando salió. Yo creo que Guns N’ Roses concentra todo lo bueno y lo malo del rock. A Jesús no le gusta.
J: Yo el otro día me puse a oír Superunknown (1994) y me encantó volver a escucharlo.
E: Ese disco de Soundgarden no me cansa nunca. Yo puedo abusar de ese grupo o de Alice in Chains, pero con Tool no me pasa. Me encanta Red Kross.
J: Es que Tool es muy denso, muy espeso. A mi Red Kross me encanta. El disco Phaseshifter (1993) es uno de mis favoritos en general.
E: A mí me cuesta un poco entrarle al principio a ciertos grupos. Jesús me ha hablado de Jesus Lizard, uno de sus grupos favoritos, que me lo ha nombrado ochenta mil veces, y todavía no me pongo a escucharlo. En cambio coincidimos en Urge Overkill, Screaming Trees…
¿Han considerado el recurso -muy válido- de incluir algunas versiones en el repertorio? ¿Si tuvieran que elegir montar un par, cuás elegirían por consenso?
E: No lo hemos hablado, pero yo por ejemplo escuchaba una canción de Los Brincos llamada “Rápidamente” que es Diavlo antes de que existiera Diavlo. La idea sería hacer algo que no sea tan evidente, pero ya quedaría en el apartado de sorpresas.
J: Me parece una buena opción esa canción. Yo el otro día escuché “Vuelo” de La vacazul y la verdad molaría hacer una versión para los directos traída al terreno de Diavlo. También habíamos pensado en hacer una de Presumido
E: Presumido es un grupo de unos amigos de Galicia que acaba de sacar un EP de tres canciones y un single que se llama “El Rey azotado”. Son muy colegas y es posible que hagamos uno de sus temas.
¿Del vasto panorama español actual que propuestas les llaman más la atención?
J: Me gusta un grupo que acaba de salir que se llama King Sapo, que tocará con nosotros en la Joy Eslava. Aquí hay bandas muy buenas. Me chiflan Morgan, Lori Meyers, Vetusta Morla. Sexy Zebras es otro pedazo de banda.
E: A mí me encanta Carolina Durante, un grupo que tiene un excelente concepto, la actitud y buenas letras. Guadalupe Plata tiene algo especial. Y una banda muy buena es Pony Bravo, con canciones como “Noche de setas”, “Superbroker”…Me llama la atención Ángel Stanich.
¿Y de los históricos?
J: Los Secretos me parece una super banda. El Último de la Fila me encanta.
E: Los Brincos y Los Bravos entre las más antiguas. Radio Futura era muy buena. Las letras eras brutales.
¿Qué pensáis sobre el cada vez más creciente consumo de audio en streaming que permite ser escuchado en cualquier lugar a donde no llegaría un disco físico?
J: Es hacia dónde va el mundo. No se le pueden poner puertas al campo. Claro, si le preguntas al dueño de una tienda de discos te dirá que es una mierda. Todo tiene su lado bueno y su lado malo. ¡Qué se ha perdido ese romanticismo de comprar discos porque ya lo tienes todo a tiro, también es cierto!. Es verdad que ahora podemos llegar a cualquier lugar, algo que antes no se podía.
E: Yo conozco a algunos que se compran vinilos de forma compulsiva, pero son minoría. Yo iba antes a Madrid Rock a comprar dos CDs y salía con quince. Y a lo mejor la mayoría ni sabía cómo sonaba. Eso ahora mismo se ha perdido. Si regalas un CD en un cumpleaños creen que estás regalando basura, cuando en realidad estás regalando arte ya que detrás de él hay mucha gente involucrada.
Hay que tratar de recuperar el interés por conocer quiénes están detrás de cada disco, de cada canción. Antes uno se aprendía quien era el ingeniero de sonido, el productor y el diseñador, y esos datos te llevaban a conocer a otros grupos y comprar discos solo por esas referencias.
E: Antes sabías que las portadas de Pink Floyd y Led Zeppelin las diseñaba Hipgnosis, sabías quien era el ilustrador, sabías que Klaus Voorman hizo la portada de Revolver, Andy Warhol la de Velvet Underground. Nosotros tenemos a Jesús Antúnez (lo señala) detrás del logo y portada.
¿Pensáis editar el disco en formato vinilo?
J: Nos encantaría. Pero queremos que tenga algo diferente, especial, no solo las diez canciones que se encuentran en digital. Eso será cosa más de la compañía. De momento estamos arrancando. Vamos poco a poco. A mí personalmente si me gustaría que se fabricara en físico, pero tampoco podemos encargarnos de todo, para eso está la compañía. Nosotros vamos haciendo canciones, las grabamos y que queden lo mejor posible.
Sois afortunados en tener detrás un apoyo importante
J: Si, totalmente. Nos sentimos super arropados y afortunados. Creen en el proyecto y nos apoyan mucho. Jon y Estanis están currando mogollón. A María y a todo el equipo les agradecemos.
E: Tenemos mucha suerte de estar con una oficina que nos apoya un montón. Nos ha llevado a Los Angeles a grabar un videoclip. ¿Cuántas compañías en España hacen eso? No te llevan ni a Vallecas (risas). Realmente no es cualquier cosa.
¿Qué tiene que pasar para que podáis vivir de Diavlo?
J: De momento solo son gastos. Inversión absoluta. Es un sueño.
E: De momento vivimos para el proyecto. Y en un futuro viviremos del proyecto. Igual hacemos otras cosas relacionadas con la música y vivimos de ella. Pero claro que deseamos que nos de tranquilidad económica más adelante.
¿Cuál es el plan de Diavlo en 2019?
J: Pues hemos comenzado una gira que ya nos ha llevado a Santander y Bilbao. Tocamos en el Joy Eslava de Madrid el 14 de febrero y seguimos hacia Valencia el 23. Acabamos de estrenar el videoclip de “Malahierba” que rodamos en Los Angeles. Haremos festivales y estamos ya haciendo temas nuevos porque es necesario para los directos tener unas 14 canciones. Tenemos ideas nuevas de cara al siguiente disco.