Inicio Ahi estuvimos John Surman Trio en JazzMadrid 2018: una exquisita experiencia sensorial

John Surman Trio en JazzMadrid 2018: una exquisita experiencia sensorial

John Surman Trio

John Surman

Centro Cultural Conde Duque, Madrid

Jazz Madrid 2018

(Noviembre 21, 2018)

 

Hay propuestas musicales que acarician los sentidos hasta hacerte caer en un estado de total placer. Dentro de la programación del Festival Internacional de Jazz de Madrid, sin duda éste concierto del saxofonista inglés John Surman y los maravillosos músicos que conforman su trío, el brasileño Nelson Ayres (piano) y el estadounidense afincado en Noruega, Rob Waring (vibráfono, marimba), ha sido uno de los más exquisitos. No hubo altisonancias ni innecesarias demostraciones de virtuosismo (que lo tienen y de sobra), sino una inmaculada ejecución instrumental de composiciones de elevada y sublime emocionalidad y fino entramado.

La reciente edición del disco Invisible Threads, de regreso al imprescindible sello alemán ECM (con el cual ha participado en más de 30 álbumes, 19 de ellos como líder), fue la perfecta coartada para su aterrizaje en Madrid, una ocasión tan especial que Ayres voló directamente desde Brasil para esta presentación. El auditorio del Centro Cultural Conde Duque, con su estupenda acústica, fue el escenario ideal para poder apreciar a plenitud una propuesta que requiere de ciertas condiciones que realcen la naturaleza acústica de los instrumentos y la delicada sensibilidad de la ejecución. La audiencia contribuyó de manera especial manteniendo un absoluto silencio durante cada interpretación, rompiendo en aplausos tras cada una de las piezas.

Surman, con simpatía, buen humor y agradecimiento, hizo comentarios pertinentes sobre las piezas, presentó y alabó varias veces a Ayres y Waring, criticó y pidió disculpas por el error del Brexit y agradeció a organizadores y público.

Aunque las piezas no fueron interpretadas en el mismo orden del disco, el concierto fluyó como un continuum, tal como ocurre con la audición del álbum. Casi no hubo espacio para otro material, aunque excepciones como “Going For a Burton” sonaron en la misma frecuencia que el resto.

Cuesta destacar un tema sobre otro. Quizá los momentos álgidos provienen de composiciones como “Autumn Nocturne” o la melancólica “Byndwweed”, en cuya estructura bien pudiera encajar la voz de Robert Wyatt; la sosegada y envolvente “On Still Waters”; la gentil “Pitanga Pitomba”, con una marimba exquisita, un expresivo piano y un saxo soprano juguetón; la luminosa composición de Ayres, “Summer Song”; la misteriosa “The Admiral”, que Surman dedicó a españoles y brítánicos, recalcando la frase “desafortunadamente metidos en el estúpido Brexit…pido disculpas por eso”; la pastoral “Concentric Circles”..

Mención aparte el tema que da título al disco, “Invisible Threads”, una auténtica delicia en la que el piano de cierto aroma bluesero y el exquisito vibráfono de Waring, sirven de soporte al libidinoso saxo barítono. Las palabras introductorias de Surman dieron la clave sobre la razón de ser de esta obra: “La música es el hilo invisible que nos une en este momento, y deseo que en el futuro haya cada vez más hilos que nos unan, no solo en este auditorio, sino a todos en este difícil mundo que tenemos actualmente”.

Fue un privilegio ser testigos de este performance especial, un jazz de cámara de alta costura. 50 años después de la publicación de su primer álbum solista, Surman, con 74 años, sigue asumiendo riesgos, atreviéndose con una formación nada convencional y efectiva.

Juan Carlos Ballesta