Lichis & Troublemakers Blues Review
Centro Cultural Conde Duque, Madrid
(Noviembre 27, 2018)
Dentro de las propuestas incluidas en el variado cartel del Festival Internacional de Jazz Madrid 2018, el blues estuvo presente. Aunque son géneros con vida propia, hay suficientes elementos comunes entre ambos. A lo largo de las décadas se han extendido por el mundo y por ello no es nada extraño que en España haya propuestas fantásticas como la del bajista y cantante Lichis (Miguel Ángel Hernando) y Troublemakers Blues Review, que actualmente conforman Christian Chloé (batería), César Pop (teclados) y Joe Eceiza (guitarra eléctrica).
El cuarteto posee un solo disco, Chicano Blues (2010), pero muchas tablas. El contenido de ese álbum formó la columna vertebral de este concierto, aunque de aquella formación solo permanece Lichis. El blues eléctrico potenciado en los años 50 en Chicago es la fuente principal de la que se alimentan, aunque bajo la perspectiva con la cual los grupos británicos y norteamericanos de los años 60 redimensionaron a muchos de los bluesistas que permanecían en la periferia de la industria musical. Blues rock y boogie blues son la esencia, con un repertorio que posee referencias de varios nombres propios, muy en especial del gran Willie Dixon, uno de los artífices del blues de Chicago y quien además tocó en la banda de Chuck Berry en sus años más influyentes. De Dixon tocaron “Pain in My Heart”, “Crazy for My Babe”, “300 Pounds of Joy”, “You´ll be Mine”, “My Babe” y la libidinosa “I Just Wanna Make Love To You”, que grabaron Muddy Waters y los Rolling Stones, entre otros. Fue presentada por Lichis como “una canción que habla de algo tan antiguo como el mundo: follar”. Mientras que de Berry interpretaron “You Never Can Tell”.
Temas como “Suzie Q” (de Dale Hawkins, popularizada por Creedence Clearwater Revival y versionada por muchos), “Crazy Mama” “del gitano J.J. Cale” y “How Many More Years” de Chester Barnett aka Howlin’ Wolf, fueron otros de los emblemáticos temas que versionaron magistralmente. Una de las más interesantes adaptaciones fue la del clásico “Black Dog” del histórico cuarto disco Led Zeppelin, sobre la cual Lichis dijo que formaba parte de las muchas melodías que grupos de rock echaron mano ya que no podían ser registradas por sus creadores.
Casi al final dejaron colar también el excelente tema propio, “Tíos raros”.
El concierto fluyó como quien asiste a la casa de los músicos, en total confianza. Cada integrante aporta su particular estilo e influencias. La singular y potente voz ronca de Lichis es un híbrido de John Mayall, Eric Burdon, Willie Dixon, Howlin’ Wolf, el Bob Dylan adulto, Tom Waits, Don Van Fliet (Captain Beefheart) e incluso Joaquín Sabina. César Pop se mueve entre Alan Price (The Aninals), Ray Manzarek (The Doors) y Jon Lord (Deep Purple), siendo fundamental en el sonido del grupo, mientras que Joe Eceiza se mueve con libertad, proficiencia y personalidad entre Jeff Beck, Eric Clapton, Roy Buchanan, Jimmy Page y otros grandes bluesistas blancos. El principal enlace con el jazz lo representa el baterista Christian Chloé, gracias a su fluido y jazzístico estilo de tocar.
Sin duda, Lichis & Troublemakers Blues Review es uno de los más relevantes y esenciales capítulos del blues rock de la península.
Juan Carlos Ballesta