El 27 de junio de 2015, a los 67 años, el bajista, compositor y fundador del grupo Yes, dejaba este mundo de forma imprevista tras sufrir de leucemia
La muerte repentina de Christopher Russell Edward “Chris” Squire, tras una rara modalidad de leucemia, cierra uno de los capítulos más importantes e influyentes en la historia del rock. Es el fin de una era.
Durante casi 47 años, el bajista inglés estuvo al frente de la legendaria banda de rock progresivo Yes, con la que definió como pocos los parámetros del rock progresivo e impuso un distintivo y único (aquí cabe especialmente el manido término) estilo, convirtiendo el bajo en un instrumento líder.
Juan Carlos Ballesta
Nada será igual desde ahora en el mundo del rock progresivo. El grupo Yes, resistente a todo, se mantuvo activo durante 45 años gracias al timón de Chris Squire, el único de los fundadores que se mantuvo en la banda. Ahora, sin él, el futuro es incierto, aunque la formación actual encabezada por el guitarrista Steve Howe y el baterista Alan White posee todas las credenciales para continuar adelante.
Los comienzos de Chris Squire
La formación musical de Squire estuvo ligada al coro de la catedral St. Andrew en Kingsbury, Londres, al que se unió a los seis años, una influencia capital en su forma de cantar y en las soberbias armonías vocales que serían uno de los sellos característicos de Yes.
No fue sino hasta los 16 cuando se tomó en serio dedicarse a la música, motivado por el fenómeno Beatle en 1964 y la Primera Invasión Británica. Dos de sus influencias primarias fueron Paul McCartney y sobre todo el estilo de John Entwistle (The Who). Luego él sería la influencia primaria para grandes bajistas como Geddy Lee (Rush), Tony Levin (King Crimson, Peter Gabriel, entre otros), Stuart Hamm y muchos más.
Tras ser expulsado del colegio por llevar una melena no permitida, no regresó más a los estudios y buscó trabajo en una tienda de música en Regent Street que le permitió comprar su primer bajo, un Rickenbacker 4001. Jamás se separaría de esa marca, la cual lanzaría en 1991 un modelo de edición limitada con su firma.
El nacimiento de Yes
Chris formó Yes en 1968 tras sucesivas experiencias con The Selfs y luego The Syn, una banda enmarcada dentro de la psicodelia británica, tras la que se unió a Mabel Greer’s Toyshop.
Pronto conocería al vocalista Jon Anderson en un bar, con quien establecería una asociación inicial cercana a la estética vocal de Simon & Garfunkel. No pasaría mucho tiempo para que Yes se formara con la inclusión de Tony Kaye (teclados), Peter Banks (guitarra) -que ya había tocado con Squire- y Bill Bruford (batería), ofreciendo su primer concierto el 4 de agosto de 1968.
El estilo de Squire, aunque aún por pulirse, era ya distinto al resto de los bajistas. Por ello nunca lo contrataron como músico de sesión, lo que lo llevó a formar Yes para desarrollar los estilos libres y personales de todos los involucrados.
Los dos primeros discos, Yes (1969) y Time and a Word (1970), aún contenían versiones de grupos como The Byrds y The Beatles, pero también el sonido que poco después explotaría con la entrada del guitarrista Steve Howe para el fantástico The Yes Album (1971) y del teclista Rick Wakeman para el emblemático Fragile (1971).
A la formación de Anderson, Howe, Wakeman, Squire y Bruford le debemos los momentos más aventurados del período clásico del progrock.
El arriesgado disco Close to the Edge (1972) consagró a Yes, pero fue el último disco en el que participó Bruford (que prefirió irse a King Crimson), privando a Squire del que sin duda fue su mejor pareja rítmica, con el que logró paradigmas difíciles de superar.
Por ello, es el baterista de su único trabajo en solitario, el increíble Fish out of Water (1975), a pesar de que para ese momento Alan White había grabado la batería en los siguientes y muy ambiciosos discos de Yes, Tales From Topographic Oceans (1973) y Relayer (1974), el último de los trabajos llenos de riesgo y aventura, el único con el teclista suizo Patrick Moraz.
El apodo de Fish
Fue Bruford el que le puso el apodo “Fish”, tras un incidente en el que Squire inundó el cuarto de hotel que compartían, durante una de sus largas y habituales duchas.
Al enterarse de su muerte, Bill dijo: “Él y yo tuvimos una relación de trabajo construida sobre la base de nuestras diferencias. A pesar de eso, o quizá debido a ello, la vieja creencia acerca de las tensiones creativas, extrañamente, funcionó”.
Aquella década de los 70, la cerraría con los siempre discutibles Going for the One (1977) y Tormato (1978), en medio ya de la explosión punk y el disco music, que habían eclipsado e incluso cuestionado las complicaciones y excesos del rock progresivo.
Luego seguiría él para entonces incomprendido Drama (1980) (con Geoff Downes y Trevor Horn del grupo de synth pop The Buggles), reivindicado por el tiempo, preámbulo de los efímeros proyectos XYZ (ExYesZeppelin) -con Alan White y Jimmy Page- y Cinema, que se transformaría en la nueva encarnación de Yes con el guitarrista surafricano Trevor Ravin.
Paradójicamente, una etapa muy exitosa desde el ángulo masivo y mediático (con “Owner of a Lonely Heart” a la cabeza), pero no tan trascendente en el plano creativo, lo que hizo que muchos fans perdieran interés en aquellos discos, aunque en vivo siempre han mantenido el magnetismo.
Squire fue, hasta el momento de su muerte el 27 de junio de 2015 a los 67 años, el único miembro que participó en los 21 discos de estudio de Yes y en todos los conciertos a lo largo de 45 años, lo que incluye 14 álbumes en vivo.
El primer show sin Chris se programó para el 7 de agosto de 2015, algo que ya estaba pautado con el bajista Billy Sherwood como sustituto, a quien el propio Chris había pedido suplir hasta su curación. Extraña sensación, sin duda.
Chris fue famoso entre sus compañeros músicos y personal técnico por siempre llegar de último, muchas veces retrasado a pruebas de sonido, ruedas de prensa e incluso conciertos.
Por ello, su esposa Scotland Squire escribió con cierto humor y juego de palabras que en inglés tiene más sentido que en español: “Mi mejor amigo y amor de mi vida será cremado hoy en Scottsdale, Arizona (donde vivían) a las 3 p.m. Sin embargo, conociendo a Chris, podría estar llegando un poco tarde (late) al evento; después de todo él siempre ha sido el tardío (“late” en inglés es fallecido), Chris Squire”.
Gracias por tanto.