El 23 de abril de 1990 fue publicado el estupendo álbum debut de una de las agrupaciones fundamentales del Sonido Manchester
Inspiral Carpets
Life
Mute/Cow Records. 1990. Inglaterra
Hace 30 años el movimiento musical de Manchester se encontraba en su momento más álgido. Conducido por el desparpajo de Happy Mondays y por la psicodélica exquisitez de The Stone Roses, decenas de bandas alimentaron la escena pop británica durante varios años, creando una sub-corriente bautizada como Sonido Manchester.
Años antes ésta ciudad al norte de Inglaterra nos había regalado a Joy Division, The Fall y The Smiths, entre otras muchas bandas, capítulos esenciales en la historia del rock.
Bebiendo de la psicodelia y el pop de los años 60, el post punk y el krautrock, y de la naciente cultura del “éxtasis” y los raves, las bandas de Manchester colocaron de nuevo el nombre de Gran Bretaña en las portadas de las publicaciones musicales, programas de TV, y en las vitrinas de las discotiendas del mundo.
Una nueva invasión se estaba produciendo, aunque no tan contundente y duradera como la de los años 60.
Entre las más interesantes bandas de aquella camada destaca Inspiral Carpets, un quinteto formado a mediados de los años 80 por el guitarrista Graham Lambert.
Influenciada por el sonido de The Doors, The Animals y The Zombies, así como por The Stranglers y Magazine, dos excepcionales bandas del período punk que usaban teclado como instrumento protagonista, Inspiral Carpets rápidamente se hizo con una importante legión de fans, así como con una desenfadada imagen simbolizada en una vaca (nombre de su propia disquera) y el slogan “Cool as Fuck”.
En 1988 debutan con el EP Planecrash, obteniendo las mejores críticas de la prensa musical británica. Con decenas de presentaciones en vivo, su popularidad creció tremendamente con la aparición de su primer disco Life (1990), conteniendo clásicos como “This is How it Feels”.
Para el momento de mayor efervescencia del sonido Manchester, Clint Boom (órgano y coros), Tom Hingley (voz principal), Graham Lambert (guitarra), Martyn Walsh (bajo) y el fallecido Craig Hill (batería), con apenas un disco, parecían conformar la banda más estable entre todas sus contemporáneas, inmersas en drogas, delirios de grandeza y pérdida de creatividad.
El encanto de Life
Life, sin duda, sigue siendo un disco único. Su encanto sigue intacto. Los doce temas que componen la edición original británica siguen sonando grandiosas y a ellos se suman los que se agregaron al CD.
Una misteriosa atmósfera de teclado introduce la acelerada pieza de espíritu punk “Real Thing”, a la que sigue “Song for a Family”, estableciendo con éste el sonido clásico de la banda, con el órgano a lo Ray Manzarek como conductor.
Y entonces surge triunfante “This is How it Feel”, innolvidable tema previamente publicado como single, cuya temática trataba sobre un suicidio en las vías de tren.
Las líneas “Hay un funeral en el pueblo” y “Parece que la encontraron bajo un tren”, tuvieron que cambiarlas por “Un carro negra atraviesa el pueblo”, “Deja una nota para una chica local”, para sonar en radio.
El cálido teclado de Boon, la expresiva voz de Hingley y los coros de la banda, los rasgueos de guitarra, la melódica línea de bajo y la dinámica batería, todo en su justa proporción, construyeron un tema de aroma nostálgico e inmortal
El siguiente tema, “Directing Traffik”, refleja el espíritu hedonista del Madchester Sound, con un ritmo bailable conducido por el bajo y un órgano a medio camino entre Manzarek, Alan Price y Dave Formula.
Regresa la urgencia punk con “Besides me”, tema pegadizo de sonido netamente británico, al cual sigue “Many Happy Returns”, más en la onda de los Stranglers.
El corto instrumental “Memories of You” que abre el lado B, funciona como puente, sobre todo en la versión en CD, formato que en 1990 había ganado mucho terreno en las preferencias y llevaba a los sellos a incluir material extra e incluso variantes, como en el caso de las edición británica norteamericana de Life, con 8 y 15 minutos adicionales, respectivamente
Otro de los singles del álbum fue la psicodélica “She Comes in the Fall”, uno de los temas distintivos de Inspiral Carpets, cuyo coro repite la frase: “Debes aprender a caminar, debes aprender a caminar antes de gatear”
Con menos de dos minutos de duración, “Monkey on My Back”, es otro de los temas de raíz punk, con una batería machacante y un atractivo coro. Contrasta totalmente con “Sun Don’t Shine”, la canción más sosegada y exquisita del disco, con influencias de The Zombies
“Inside My Head” es otra píldora de dos minutos de espíritu psycho-punk, preámbulo del largo tema “Sackville”, que con casi siete minutos cerraba la edición vinilo como si los Doors hubieran resucitado una noche en el club The Hacienda
Los temas extras incluidos en CD fueron el melódico single de 1989, “Move”, el cual presagiaba a la perfección lo que se avecinaba; la adictiva “Commercial Rain” (versión regrabada del lado del single “Joe” de 1989); y tres temas que formarían parte del Island EP (1990), “Weakness”, la deliciosa “Biggest Mountain” y “I’ll Keep It Mind”.
Los años que siguieron fueron prolíficos, con múltiples singles, EPs y otros tres indispensables álbumes, The Beast Inside (1991), The Revenge of The Goldfish (1992) y Devil Hopping (1994), antes que la banda hiciera una larga pausa.
Inspiral Carpets es un capítulo inolvidable dentro de la música pop de nuestro tiempo. Su legado, sin embargo, aún no ha sido valorado en su justa dimensión.
Juan Carlos Ballesta